El helado de feta es una forma única de realzar tus platos, especialmente como acompañamiento de ensaladas o platos mediterráneos. Con su sabor salado y cremoso, este helado sorprende y añade un toque de frescura a aperitivos o incluso brunchs. Aquí te explicamos cómo prepararlo con tu Ninja Creami.
Ingredientes
- 200 g de queso feta
- 100 ml de nata entera (o nata vegetal para una versión sin lactosa)
- 100 ml de leche entera (o leche vegetal)
- Una pizca de pimienta negra recién molida
- Unas hojas de albahaca fresca o menta (opcional, para un toque herbal)
Preparación
- Prepara la mezcla
. En una licuadora, tritura el queso feta con la crema, la leche y la pimienta hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si quieres añadir un toque herbal, añade unas hojas de albahaca o menta antes de licuar. La textura debe ser suave, pero lo suficientemente fluida como para congelarse bien. - Congelación con el Ninja Creami.
Vierta la mezcla en el recipiente del Ninja Creami, dejando que la mezcla alcance la de LLENADO MÁXIMO . Tape el recipiente y colóquelo en el congelador durante 24 horas para asegurar que cuaje correctamente.
Una vez congelada la mezcla, inserte el recipiente en la Ninja Creami y ejecute el programa de Helado para lograr una textura cremosa. Si el helado está un poco duro, use la Recentrifugar para ablandarlo y lograr la consistencia perfecta.
Catas y Maridajes
Este helado de feta es perfecto con una ensalada de tomate y pepino, un carpaccio de verduras o unas tostadas. Añade unas hojas de albahaca fresca, un chorrito de aceite de oliva y pimienta negra para darle el toque final. Este helado es una forma única de revivir los sabores del feta y aportar una frescura única a tus platos.
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