Si buscas un helado único y sabroso para deslumbrar a tus invitados, este helado de pimiento rojo y queso feta es justo lo que necesitas. La combinación del sabor ligeramente dulce del pimiento rojo con el sabor salado y cremoso del queso feta crea una experiencia única y verdaderamente deliciosa. Es perfecto para acompañar una ensalada o un plato mediterráneo en un brunch único.
Ingredientes
- 1 pimiento rojo grande
- 100 g de queso feta
- 100 ml de nata líquida entera
- 50 ml de leche entera (o leche vegetal, según tu preferencia)
- Una pizca de sal
- Una pizca de pimienta negra recién molida
- Unas hojas de albahaca o menta (opcional, para un toque de frescura)
Preparación
- Prepara el pimiento.
Precalienta el horno a 200 °C. Coloca el pimiento entero en una bandeja para hornear y ásalo durante unos 20 minutos, dándole la vuelta a la mitad del tiempo, hasta que la piel esté ligeramente ennegrecida y el pimiento esté tierno. Retíralo del horno, déjalo enfriar, pélalo y retira las semillas. - Licúa todo.
En una licuadora, tritura el pimiento asado con el queso feta, la crema, la leche, la sal y la pimienta hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Si quieres añadir un toque herbal, añade unas hojas de albahaca o menta para un toque fresco. - Congelación con el Ninja Creami:
Vierta la mezcla en el recipiente del Ninja Creami, asegurándose de no sobrepasar la de LLENADO MÁXIMO . Tape el recipiente y colóquelo en el congelador durante 24 horas para que cuaje.
Una vez congelado el helado Helado para una textura cremosa. Si el helado está demasiado firme, utilice la Recentrifugar para ajustar la consistencia.
Saboreo
Sirva este helado de pimiento rojo y queso feta con una ensalada de tomate, un plato de crudités o incluso con galletas crujientes. Esta combinación dulce y salada es sorprendente e irresistible, perfecta para añadir un toque mediterráneo a su brunch o comida. ¡Una bola de helado no solo aporta sabor, sino también un toque visual que impresionará a todos sus invitados!
