La crema de chocolate blanco es una delicia irresistible para los amantes de los sabores cremosos y delicados. Es perfecta para cubrir crepas, rociar sobre fruta o simplemente untar en pan. ¡Incluso puedes usarla para hacer tu propio helado con la Ninja Creami! ¡Aquí te explicamos cómo prepararla fácilmente en casa!

Ingredientes
- 200 g de chocolate blanco de calidad
- 100 ml de leche condensada sin azúcar (para una textura suave)
- 50 g de mantequilla sin sal
- 2 cucharadas de aceite de coco o de avellana (para una textura aún más cremosa)
- 1 pizca de sal (para equilibrar el sabor)

Preparación
- Derretir el chocolate blanco
En una cacerola, derretir suavemente el chocolate blanco con la leche condensada a fuego muy lento, revolviendo constantemente para evitar que se queme. - Añade la mantequilla y el aceite.
Una vez que el chocolate esté derretido y bien mezclado con la leche condensada, añade la mantequilla y el aceite de coco o de avellana. Remueve hasta obtener una mezcla suave y homogénea. - Sazona y perfecciona la textura.
Añade una pizca de sal para equilibrar el dulzor del chocolate blanco. Mezcla bien para que la sal se integre bien. - Enfriamiento y almacenamiento:
Vierta la crema en un frasco limpio y déjela enfriar. Una vez a temperatura ambiente, puede guardarla en el refrigerador durante unas dos semanas. Antes de cada uso, deje que la crema recupere su textura cremosa.

Saboreo
Esta crema de chocolate blanco es deliciosa sobre tostadas, panqueques o incluso añadida a una bola de helado para un postre ultra indulgente. ¡Es una receta que encantará a grandes y pequeños!